Todas las drogas tiene en común que, una vez introducidas en el organismo, llegan al cerebro a través de la sangre produciendo allí distintos efectos.
El THC, componente de la marihuana, es rápidamente absorbido por el cerebro y se va acumulando en él, desde donde se va eliminando lentamente.
La fijación del THC en el cerebro provoca algunos de estos efectos:
- Entorpece la memoria, sobre todo la de corto plazo, lo que dificulta la retención de cuanto se haya vivido bajo los efectos de la droga.
- Altera la capacidad de concentración
- Interfiere en los proceso de aprendizaje
- En la adolescencia pueden afectar seriamente la maduración y el desarrollo.
Cannabis, Energy Control
Dependencia:
Como cualquier otra droga puede generar dependencia psicológica, entendiendo esta como la dificultad de disfrutar de la vida y hacer frente a sus desafíos si no se está bajos sus efectos.
Depresor del sistema nervioso central:
Los efectos de la marihuana son parecidos a los del alcohol aunque impacta un poco más sobre la percepción.
Cuando se fuma es rápidamente absorbida por los pulmones, y llega al cerebro en un corto periodo de tiempo.
Los efectos empiezan a notarse a los pocos minutos del consumo, alcanzando su pico máximo al cabo de unos 30 minutos, con una duración de dos o tres horas.
Consumidores y consumos:
Ninguna droga provoca siempre, y en toda situación, las mismas experiencias. Sus efectos generales varían en función de diversas circunstancias:
- Variedad de la planta: Las especies tienen diferentes concentraciones de THC . Como es una droga ilegal, se desconoce la adulteración producida en ella.
- Personalidad del consumidor, historia de vida, circunstancias personales.
- Frecuencia de uso
- Ambiente de consumo, personas, espacio físico
- La reacción del organismo a la sustancia siempre es variable.